La más reciente edición de la Feria Internacional del Libro del Tolima (FELIT) ha culminado con un balance que no solo superó las proyecciones iniciales, sino que la consolida definitivamente como una cita primordial para el ecosistema cultural y literario colombiano.
El éxito de la FELIT se vio potenciado por la participación estratégica de actores clave del sector. La Editorial Caza de Libros, bajo la dirección visionaria de Carlos Pardo, mantuvo una presencia notoria, promoviendo un catálogo diverso y facilitando el diálogo directo entre la autoría y sus lectores. De igual forma, la contribución de CORCULTURA, encabezada por Eduardo Aliguieri, resultó fundamental para la articulación de la agenda cultural, aportando una curaduría que, por su impecable criterio, enriqueció la experiencia integral de todos los participantes.
La agenda de la feria se desplegó como una autentica inviotacion intelectual. Desde los lanzamientos de nuevas obras que generaron gran expectación en el ámbito librero, hasta las presentaciones y conversatorios, cada intervención fue recibida con entusiasmo unánime.
Los pabellones y los recintos dedicados a las conferencias fueron un intercambio constante de ideas, donde autores consagrados y talentos emergentes convergieron para compartir sus universos creativos. Este dinamismo confirma que la FELIT es, en esencia, un ecosistema cultural vivo donde la palabra escrita ostenta la primacía.

El taller, enfocado en la creación de imágenes mediante IA, proveyó de herramientas prácticas y estratégicas tanto a escritores como a diseñadores gráficos, ilustrando con precisión cómo esta tecnología puede erigirse como una aliada fundamental en el proceso creativo para enriquecer las narrativas y optimizar los flujos de trabajo en el diseño editorial.
El balance final de la FELIT se cifra en la calidad de los invitados, la masiva afluencia de público, la demostrada resiliencia ante los imponderables logísticos y la vanguardia de la agenda programática

