El Viernes Negro impulsa un fenomenal aumento en las ventas minoristas en múltiples países, consolidándose como un evento de escala global.
El Black Friday, evento anual de descuentos, ha dejado una huella sin precedentes en la industria minorista mundial. Las cifras revelan un extraordinario aumento en las ventas en diversos países, consolidando su posición como una jornada comercial trascendental a nivel global.
Las ventas minoristas durante el Black Friday alcanzaron niveles históricos en múltiples países. En Estados Unidos, se registró un aumento del 20% en las ventas con respecto al año anterior, con cifras superiores a los 10 mil millones de dólares. Los productos electrónicos, especialmente los dispositivos móviles y las computadoras, encabezaron la lista de las compras más populares.
Por su parte, en países europeos como Reino Unido, Alemania y Francia, las ventas durante el Black Friday también experimentaron un crecimiento excepcional. Se reportó un aumento promedio del 15% en las ventas en comparación con el año pasado, con un gasto estimado de más de 5 mil millones de euros en toda la región.
En Asia, países como China y Japón han adoptado gradualmente esta tradición estadounidense, generando un incremento del 30% en las ventas durante el Black Friday. El auge del comercio electrónico impulsó la mayoría de estas transacciones, con un aumento significativo en las compras realizadas a través de plataformas online.
Los sectores más beneficiados durante esta jornada fueron la tecnología, la moda y los productos para el hogar. Los descuentos agresivos y las promociones especiales en estos segmentos atrajeron a una gran cantidad de consumidores, superando las expectativas de ventas de muchos minoristas.
El Black Friday del 2023 ha establecido récords de ventas en varios países, consolidándose como un evento clave en el calendario comercial global