Colombia, al obtener el título del árbol de Navidad ecológico más alto del mundo, no solo ha superado expectativas, sino que también ha redefinido los estándares en términos de sostenibilidad festiva.

Colombia celebra una Navidad histórica al establecer un récord mundial con el árbol de Navidad ecológico más alto, alcanzando alturas que superan las expectativas y dejando atrás a competidores internacionales, incluida la República del Líbano. La hazaña ha sido certificada por Guinness World Records, destacando el compromiso del país sudamericano con la sostenibilidad y la creatividad festiva.

La estructura imponente no solo es un logro en términos de altura, sino también un testimonio del enfoque ecoamigable. El árbol, adornado con elementos reciclados y materiales sostenibles, simboliza el compromiso de Colombia con la preservación del medio ambiente incluso en medio de las festividades.

Segun el portal Infobase, construido con 96.865 botellas de plástico recicladas y una altura de 30 metros, el árbol del Centro Comercial Centro Chía (Cundinamarca) se llevó el récord mundial que a la fecha ostentaba la República del Líbano.

“Los visitantes podrán conocer este espectáculo visual, donde se simboliza el compromiso con la sostenibilidad y la protección del medio ambiente, al tiempo que se hace un llamado sobre la importancia de generar estrategias que permitan ayudar al planeta dentro de la economía circular”, señalaron desde el centro comercial Centro Chía.

Si usted esta interesado en  conocerlo , lo puede visitar  de lunes a domingo a partir de las 6:00 de la tarde y hasta las 12:00 de la noche.

Colombia, al obtener el título del árbol de Navidad ecológico más alto del mundo, no solo ha superado expectativas, sino que también ha redefinido los estándares en términos de sostenibilidad festiva. Este logro resuena a nivel global, destacando la capacidad del país para combinar creatividad, tradición y conciencia ambiental en una celebración única.

Resalta la importancia de integrar prácticas sostenibles en las tradiciones festivas. El árbol no solo es un símbolo festivo, sino también un recordatorio inspirador de la responsabilidad ambiental.