“Son más  los colombianos que tienen un servicio financiero incluso que los que tienen acceso a agua potable”

“Tan diversa como Colombia” es el nombre de la edición número 57 de la Convención de Asobancaria, que reúne a los expertos y líderes del sector financiero del país para tratar los temas coyunturales de dicho gremio.

Lo que se dejó en evidencia es que el sector financiero aún sufre las consecuencias de la recesión económica que produjo la pandemia. Leonardo Villar, gerente del Banco de la República, describió el dinamismo y crecimiento del empleo y la productividad durante 2021 y 2022 como un rebote tras la “dramática caída” durante la pandemia.

En la apertura del evento el representante del Banco Emisor, se refirió también a la inflación como algo que “se encuentra aún en niveles inaceptablemente altos”, enfatizando en que se encuentran lejos de la meta de 3% que ha establecido el banco y apenas están retornado esta meta, que se espera puedan alcanzar a finales de 2024.

“La economía se está desacelerando y eso significa que los colombianos tienen menos ingresos, y al tener menos ingresos también tienen menos posibilidad de adquirir nuevos créditos”

Por su parte, el superintendente financiero César Ferrari, fue enfático en que Colombia necesita “generar mucho más ahorro” y ser más equitativa, afirmó que “el principal problema de este país es que consumimos mucho, pero además consumimos de una manera desigual en las capas altas de la población que se consume mucho, pero en los de abajo no alcanzan, ni siquiera para comprar dos comidas como lo dicen muchos estudios”

“El ahorro, y por lo tanto la inversión doméstica, para los siguientes años comienza a ser reducida y eso lo que hace es trabar el desarrollo en el futuro, por eso las tasas de crecimiento de este año del próximo año van a ser sumamente reducidas como consecuencias del exceso de consumo de los años anteriores. Lo que queremos hacer la Superintendencia es incentivar el crecimiento del ahorro” dijo también el superintendente.

En esta misma línea se refirió al estímulo que hubo durante la pandemia para los créditos de consumo como una de las principales consecuencias de la desaceleración económica, que debido a la inflación crecerá en un 0,6% y, de acuerdo con Bancolombia, permitirá un proceso de lenta reducción. “La economía se está desacelerando y eso significa que los colombianos tienen menos ingresos, y al tener menos ingresos también tienen menos posibilidad de adquirir nuevos créditos” Aseguró Ferrari.  

La bancarización, en contraste, resuena como una de las principales herramientas a favor de la inclusión financiera. Jonathan Malagón, presidente de Asobancaria dijo que “34 millones de colombianos de los 37 millones y medio de adultos ya están bancarizados”, esto, de acuerdo con el último reporte de Banca de Oportunidades representa un 93.2%. “Son más  los colombianos que tienen un servicio financiero incluso que los que tienen acceso a agua potable”, aseveró el presidente de la asociación bancaria